lunes, 22 de diciembre de 2014

Cusco, 35 años después

Luego de nuestra enriquecedora experiencia en Samana Wasi, nos dirigimos nuevamente a Cusco, donde nos encontraríamos con un grupo de personas con quienes viajaríamos durante los próximos diez días por diferentes ciudades y lugares arqueológicos de Perú y Bolivia.

Para ver las fotos más grandes haz clic en ellas


Con los sentidos bien alertas, salimos a dar una vuelta por la ciudad




La arquitectura de Cusco es llamativamente colonial y me gustó ver la ciudad más limpia que la vez anterior




Es notable la cantidad de vehículos que circulan por la ciudad. Cruzar una calle, aunque tenga paso de peatones, implica su riesgo.



 Una bonita  plaza con fuente de agua





Nuestro selfie del paseo




Buscábamos una casa de cambio "frente a la Plaza de Armas", 
y ya se veía no muy lejos






Una de las recovas, frente a la Plaza de Armas.  
Imperdible paseo en Cusco




Casa de gobierno





La recova, vista desde la plaza.
Miren la piedra trabajada, a la der. de la foto



En el anterior viaje, hace nada mas que 35 años, 
recuerdo haber llegado hasta la iglesia que se ve en la colina




La Plaza de Armas del Cuzco fue antiguamente un pantano, que durante la época de los incas fue secado y se transformó en el centro administrativo, religioso y cultural de la capital del imperio. Después de la conquista fue ocupada por los españoles, quienes lo rodearon de templos y mansiones construidas sobre los palacios incas de alrededor; en ella fue ejecutado Túpac Amaru II en 1781. Actualmente es el núcleo central del Cuzco moderno, rodeado por restaurantes turísticos, joyerías, agencias de viaje y los mismos templos del periodo de la conquista. ( tomado de Wikipedia )





La pileta de la plaza de armas fue diseñada por el escultor francés J.P. Victor Andre y fundida en el Bronx, Nueva York  durante la segunda revolución industrial en Norteamérica. Otras fuentes idénticas fueron instaladas en las ciudades norteamericanas de Savannah, Georgia, en Poughkeepsie, Nueva York y en Madison, Indiana.



Coronando la fuente, Pachacútec o Pachacuti (quechua: Pacha Kutiy Inqa Yupanki; "Inca del cambio del rumbo de la tierra, digno de estima. fue el noveno gobernante del estado Inca y quien lo convirtió de un simple curacazgo a un gran imperio: el Tahuantinsuyo. Aunque no había sido designado como sucesor por su padre Huiracocha Inca, dirigió una defensa militar ante el belicoso ejército Chanca mientras que éste y su hijo Inca Urco habían huido del señorío. La victoria sobre los chancas hizo que Huiracocha Inca lo reconociera como su sucesor alrededor de 1438.
Como parte de su visión de estadista y caudillo guerrero conquistó muchas etnias y estados, destacando su conquista del Collao que acrecentó el prestigio de los incas y particularmente de Pachacútec, quien por la notable expansión de sus dominios fue considerado un excepcional líder, dando vida a historias épicas e himnos gloriosos en tributo a sus hazañas. ( Wikipedia)






Iglesia de los jesuitas





La catedral, frente a la Plaza de Armas, siempre muy concurrida





Detalle de la puerta de la catedral



Vista lateral de la catedral







Campanario de la misma




Cruzar esta calle tiene su trabajo :)



Esos detalles tan bonitos que, si no estás atento, te los pierdes





Algunas calles son más estrechas que ésta todavía




Este es el inicio de la "calle de la piedra de los doce ángulos".
 Miren la diferencia tecnológica y estética del muro de la izquierda, inkaico, y el de la derecha, posterior a  la conquista.





Las niñas, con vestimentas típicas, 
cobran a los turistas por dejarse fotografiar





Bajando por esta mágica calle





Impresionante muro, antisísmico, 
con sus grandes piedras unidas sin argamasa.





Junto a la Piedra de los doce ángulos. 
Imagínate que este muro tiene al menos un metro de grosor
 y que entre las piedras no cabe una hoja de afeitar






Vista de abajo hacia arriba, con el detalle característico de las piedras.
Esos salientes se asemejan a la colada de una fundición




"La de doce" sin turistas, nos deja llenos de incógnitas. 
Por qué la construyeron de esa manera?




En esta foto se pueden ver tres tipos de muros.
 El de la derecha sobresale, sin duda, sobre los otros dos. 
Siendo el más antiguo, parece que el tiempo no lo afectara.



De a ratos lloviznaba, llovía, goteaba, bastante húmedo el día, no impedía que hiciéramos nuestro recorrido previsto.  
Así de linda la ciudad





A la derecha, este muro oculta el exterior del Coricancha.
Nótese la calidad de la puerta, muy superior al resto del muro reconstruido.
 A lo lejos, el campanario del convento de Santo Domingo.





La puerta tiene un cristal, que me permitió hacer esta foto del interior



Frente al convento






Entrada al convento de Santo Domingo, y a su izquierda, está la entrada al Coricancha. Un rato después de tomar esta foto nos llevamos la desagradable sorpresa al encontrarlo cerrado, cambiando totalmente nuestros planes.
Me impactó ésto, ya que en mi viaje anterior, por esos despistes que pueda uno tener, no lo visité.



Haciéndonos todavía a la idea de que no entraríamos ese día, 
continuamos bajo una, por momentos, intensa llovizna. 
Aproveché para fotografiar el campanario del convento


  
El convento de Santo Domingo fue construido sobre el Coricancha,
 (en quechua: Quri Kancha, ‘templo dorado’,
originalmente Inti Kancha («Templo del sol»)















Aquí se ve con más detalle, como aprovecharon para construir el convento sobre lo "viejo" 


Detalle del exterior



Carmen posando. Detrás de ella vemos el exterior del Coricancha




Imaginemos como sería este sitio, con sus esculturas y adornos







Qué lugar bonito






En esta foto se ven las diferentes arquitecturas, respondiendo a diferentes épocas y culturas







Una señora del lugar, con sus vestimentas típicas





Luego de esta foto, subimos a la fortaleza de Sacqsayhuamán, bajo una penetrante llovizna que no nos impidió disfrutar ese especial lugar. Finalmente
 volvimos al hotel a recoger nuestras cosas e intentar llevar adelante unos importantes cambios de planes. Una inesperada huelga general empezaría a medianoche, con bloqueos de ruta y esas cosas, así que pensábamos llegar a Puno sin problemas ( eso esperábamos ) y ver el Coricancha en otro momento del viaje que nos llevaría a un recorrido mágico por diferentes lugares especiales
 de Perú y Bolivia.
Continuará...






domingo, 30 de noviembre de 2014

Caminata a Chupani

Durante la estadía en Samana Wasi tuvimos diversas actividades, entre ellas, ocupando un especial lugar, está la caminata a Chupani.
Movilizarse a más de 2.900 metros de altura sobre el nivel del mar implica un esfuerzo extra. Si bien, antes del viaje, salíamos a caminar casi todos los días una horita, NO ES LO MISMO jajajjaja.
Partimos tempranito, luego del desayuno. Llovíznaba un poco de a ratos. El aire frío, el paisaje imponente y las ganas de ir a un lugar especial, muy especial, nos impulsaba.


Conoceríamos donde Antón fue iniciado por los ancianos de la Aldea A, tal como él mismo lo cuenta en su libro “Y... El Anciano Habló”

Recuerden que para ver las fotos mas grandes
 deberán clicar sobre ellas


Comenzamos a caminar, y lo hicimos en varios grupos, "los lentos" primero, entre los que estábamos Carmen y yo y los rápidos una media hora mas tarde. Descubrí que para hacer una foto, relajado, tratando de enfocar bien, conseguía que los demás se alejaran y alcanzarlos se me hacía un poco dificultoso.
La altura se hacía notar.


Me llamó la atención la entrada a esta finca




Otra vista de la misma





Estos carteles vienen muy bien como ayuda memoria y para que vean que estábamos caminando a 2.900 msnm y subiendo!!!!


Cerros, nubes, mucha vegetación, aire frío y húmedo.




Chuck, de USA, Carmen de España y Walter de Argentina, 
atravesando un caserío



El narrador posando, mientras recuperaba el aire
 que por momentos se me hacía escaso





me llamó la atención como pasaba la luz
por la ventana de una ruina en la montaña






Rosas muy perfumadas




Niñas del lugar yendo al cole. 
Muchas horas mas tarde nos las volvimos a cruzar



Diego






Estrella y Carmen





Carmen y yo




una mototaxi nos hizo photobombing




un bar donde descansar y refrescarse, cosa que imaginé
 ya que no nos detuvimos mas que a sacar esta foto





bonito, no?





Maritza con su muleta que muchas veces olvidaba usar





cantarina agua de deshielo 





Fin de etapa, descanso y risas para reponernos 
antes de continuar la subida.
En la foto, de izquierda a derecha, de pie Guada, Celia, Ana, Maritza, Zhanna; sentados Chuck, Carmen, Estrella y yo





Otra foto de grupo: Celia, Chuck, Ana, Diego, Maritza, Estrella,
 Zhanna y yo. Más atrás: Carmina y Gabriel meditando.








Carmen señala que estamos a 3.353 metros de altura.
 No sabíamos que nos tocaba subir bastante todavía.
Tampoco era algo que nos importase.



No crean que fue fácil subirse a esa resbalosa rama jajajjaj







una toma diferente de ese hermoso lugar





Gabriel aprovechó la misma rama









Carmen disfrutando



Si no recuerdo mal, esas eran las montañas del oro, tal como creyeron entender los conquistadores españoles que se encargaron de horadarlas sin encontralo. 
Claro, que los lugareños se referían a otro tipo de riquezas :)
Me dice Carlos, que la montaña se llama Koriwayrachina, 
"donde se ventea el oro"





Hacer un selfie con Carmen, desde mi metroochentaipico, 
 no es nada fácil, y a ella la recorté varias veces



Diego






Carmen y Estrella




Haciendo yyyyyyyyaaaaaagggghhhjj





Los árboles nos cuentan como sopla el viento por aquí





Ana y Estrella




Celia y Carmen



Guada, Carmina y Gabriel





Diego alimentándose





La risa de Celia




Walter






Luego del descanso, continuamos la marcha, 
por momentos bajo una intensa llovizna






Al costado del sendero, encontramos las ruinas del poblado 
de los que décadas después, 
construyeran en otro lugar, oculto y secreto, la Aldea A




muchas ruinas, en su estado natural sin "reparar"






Esta inmensa roca, bastante mas alta que una persona, 
no es de allí, y "está puesta" sobre unas piedras pequeñas 
de manera artificial. No es posible
 que hubiera llegado hasta ese sitio de forma natural.
 Uno de tantos guiños que nos muestran de lo que eran capaces 
de manejar esa gente.




una muestra de la vegetación que cubre las ruinas











Posando entre las ruinas con Walter haciendo photobombing.
Maestro!!!





Hermoso paisaje. Hacia la izquierda de la foto,
 y unas decenas de metros hacia abajo, 
corría el río que mas tarde cruzaríamos.
 No era muy apto que digamos para gente con vértigo





Carmen con mucho frío en esta foto



Abrigadita al lado del río que antes mencioné




Cansado y feliz, habíamos llegado a nuestro destino.





Fue muy bonita esta sorpresa











A esta chica le vinieron ganas de meterse al río











Es en este lugar donde Antón Ponce de León Paiva
 recibiera su iniciación



Preparado para cruzar el río de aguas heladísimas.





Selfie luego de cruzar el río.
Minutos después hicimos una danza de energía, inolvidable.
Descubrimos que en las laderas de las montañas,
 había gente del lugar observándonos atentamente




Había que regresar, y este era el camino de vuelta,
 internándose en el bosque




cada un@ en lo suyo, había mucho por mirar.







Dicen que este es el bosque de las hadas, y en algunas fotos, ampliadas y mirándolas con atención , algo se puede ver




me alejé lo suficiente como para estar solo en este lugar
 y fue muy emocionante hacerlo




Hay muchas fotos que no pudieron ser por falta de luz 
o por exceso de agua :)






Carmen en el bosque






Esta fue una de las últimas fotos del día, ya que se largó a llover.
Una inolvidable caminata de unas ocho horas, sin contar los descansos. Subiendo y bajando. Conociendo lugares bastante alejados de los circuitos turísticos tradicionales y poco frecuentados. 
Esto nos preparó para los días que estaban por venir, 
de este viaje mágico.